Si no vives en una cueva, sabrás qué es ChatGPT.
Puede que ya sea una herramienta imprescindible en tu día a día.
O puede que tan solo hayas jugueteado un par de veces con ella.
Yo me encuentro en el primer grupo. En un día normal de trabajo tengo que responder a decenas de emails, manejar diferentes idiomas, procesar mucha información y escribir mucho texto. Y usar ChatGPT en estas tareas me hace más productivo.
Pero no es la única herramienta de IA que uso.
Existen más aplicaciones que hacen prácticamente lo mismo que ChatGPT.
Hoy voy a hablarte de cómo y por qué uso esas otras aplicaciones (aunque ChatGPT sigue siendo mi preferida).
Al lío.
Claude
Claude es un LLM (modelo de lenguaje) de Anthropic, una startup fundada por ex-empleados de OpenAI. Es muy parecido a ChatGPT.
Hasta hace no mucho, solo estaba disponible en Estados Unidos y para acceder desde España había que usar una VPN. Por suerte, desde mediados de mayo ya está disponible en Europa.
Al igual que con ChatGPT-4o, puedes adjuntar documentos e imágenes en tus conversaciones. Es la herramienta que más utilizo justo por detrás de ChatGPT. Prácticamente voy alternando ambas para no gastar todos los tokens de una sola de las dos.
Lo bueno
A mí me funciona especialmente bien para crear contenido desde 0, como primeras versiones del texto de una página web, las instrucciones de un proceso, respuestas a correos genéricos…
También hace muy buenos resúmenes y FAQ de los documentos que adjuntes. Es perfecto para cuando manejas un gran volumen de información.
Lo malo
El lado negativo es que Claude tiene un límite de mensajes que puedes utilizar al día. También tiene límites de mensajes por conversación, lo que hace que puedas tener la información dispersa. Suelo alcanzar ambos límites muy pronto cuando utilizo Claude.
Otra desventaja es que se ancla mucho en tu primer mensaje. Si quieres cambiar por completo de tema, debes cambiar la conversación o seguirá haciendo referencias a temas anteriores.
Gemini
Podríamos decir que Gemini (antes Bard) es el ChatGPT de Google. Para mí, Gemini esta un escalón por debajo de Claude o ChatGPT. Al menos, esta es mi percepción.
Lo bueno
Suele ser más didáctica en comparación con Claude o ChatGPT.
Por ejemplo, si a Claude o ChatGPT le pides que te corrijan los errores de un mensaje, normalmente recibirás el texto ya corregido.
Con Gemini primero recibes un poco de feedback (qué ha cambiado y por qué) y luego la versión corregida.
Por eso, yo la uso principalmente para corregir errores en textos y para aquellas tareas de menor valor añadido en las que no quiero desperdiciar tokens en Claude o ChatGPT4.
Además, aunque tiene límite de uso, rara vez lo he alcanzado.
Por último, al ser de Google se integra mejor con el ecosistema de Google: YouTube, Google Maps…
Lo malo
Como decía, me parece que a nivel de “inteligencia” está por debajo de sus competidores ChatGPT y Claude. La calidad de sus respuestas suele ser de un nivel inferior.
También se niega con más frecuencia a realizar lo solicitado. En muchas ocasiones, ante peticiones que ChatGPT o Claude habrían cumplido sin rechistar, la respuesta que obtenía de Gemini era un “Lo siento, no estoy diseñado para hacer eso”.
Meta Llama 3
El LLM de Facebook (Meta). De código abierto, puedes instalarlo directamente en tu ordenador sin necesidad de conectarte a la nube para utilizarlo.
Lo bueno
Como abogado o asesor, seguro que manejas información sensible y/o confidencial. Por eso, poder ejecutar Llama 3 localmente en tu ordenador es una gran ventaja en términos de seguridad y privacidad.
Al procesar localmente los datos, minimizas vulnerabilidades y los riesgos asociados con la transmisión y almacenamiento de datos en servidores externos.
Lo malo
Aunque instalar Llama 3 en tu ordenador no es ciencia espacial y hay muchos tutoriales al respecto, no es tan cómodo como entrar en una web y empezar a chatear directamente con cualquiera de las otras alternativas.
Si no te llevas bien con la tecnología, descartaría usar esta herramienta.
En resumen, no te ancles a ChatGPT.
Experimenta con las otras alternativas que existen, como las que he mencionado en esta publicación.
Comprueba por ti mismo cuál te da mejor resultado en cada caso de uso.
Y aprovecha las posibilidades de cada una de ellas.
Yo uso ChatGPT-4o a diario, pero procuro reservarlo para aquellas tareas donde sé que va a aportarme más valor y así maximizar el rendimiento que puedo obtener de cada token.
¿Y tú? ¿Conocías ya estas alternativas a ChatGPT? ¿Las utilizas frecuentemente? Cuéntamelo en los comentarios.